PLANIFICACIÓN
Si pudiera volver al pasado tomaría conciencia de que podría cambiar mi presente. Hoy y ahora, soy consciente de que tengo el poder de cambiar mi futuro.
¿Cuántos propietarios de pequeñas y medianas empresas se olvidan de planificar en su negocio?
Sorprende saber que más del 90 % de las compañias se olvidan de marcarse objetivos.
En muchas ocasiones, la respuesta del propietario es “En mi día a día tengo muchas cosas importantes que solucionar, y así todos los días, no tengo tiempo ni para planificar ni para marcarme objetivos”.
Cuando nos encontramos en esta situación, vamos a la deriva, no tenemos el control y nos dedicamos a dar respuesta inmediata a los problemas que van surgiendo. Los niveles de estrés se disparan y la confianza en tu equipo se va deteriorando, al fin y al cabo, tienes que ser tú quien esté ahí dando solución a todas las incidencias.

Écha un vistazo a la conversación que tuvimos con el Propietario de una PYME:


Voy a crecer un 3% en ventas, ese será mi objetivo de ventas.
A priori, parece un objetivo, es alcanzable y lo tienes medido, pero no es un objetivo (le contesté).
Para saber si es un objetivo tenemos que someterle a la gran pregunta “¿Para qué? “
¿A qué te refieres?, me preguntó.
¿Para qué quieres crecer un 3%?
Pues no lo sé, un 3% me parece razonable, supongo.
¿Por qué no un 15% o un 30%?
Eso es mucho.
¿Mucho?, mucho ¿Para qué?
Pues no sé.
Esta conversación puede resultar extraña, pero ocurre en muchas ocasiones.
De hecho, una respuesta muy típica del propietario suele ser
- “En mi día a día tengo muchas cosas importantes que solucionar, y así todos los días, no tengo tiempo ni para planificar ni para marcarme objetivos”.
Cuando nos encontramos en esta situación, vamos a la deriva, no tenemos el control y nos dedicamos a dar respuesta inmediata a los problemas que van surgiendo.
Los niveles de estrés se disparan y la confianza en tu equipo se va deteriorando, al fin y al cabo, tienes que ser tú quien esté ahí dando solución a todas las incidencias.
"Nadie contempla en su mente fracasar, sin embargo, la mayoría de los que fracasan no tienen en mente un plan"
¿Qué quieres conseguir?
¿Conseguir generar empleo y ser una persona que deje un legado o contibución social?
¿Obtener la mayor cuota para ser el lider del mercado y así presumir en sus conversaciones con amigos y familia?
¿Generar los suficientes ahorros para abrir un nuevo establecimiento en la playa para acabar retirándote allí?










¿Qué necesitas para conseguirlo?
En este momento, sí estamos en condiciones de decir que hemos fijado un objetivo del 3% razonado, ya que será lo que necesitaremos para conseguir aquello que realmente nos importa o nos motiva.
Un 3% de incremento sin más, sin un propósito, no tiene fuerza. Ese 3% debe ser la acción que tenga que llevar a cabo para conseguir mi verdadero objetivo.
Un verdadero proceso de Planificación te permitirá:




Hemos ayudado a pequeñas y medianas empresas de distintos sectores, y todas ellas querían formar parte de ese privilegiado 10% de empresas que querían dar un paso hacia delante en su futuro. Hoy se sienten agradecidos y se enorgullecen de haber profesionalizado su gestión gracias, principalmente, a su compromiso con ellos mismos y con el entorno que les rodea.
No dudes en ponerte en contacto con nosotros si quieres cambiar tus resultados. Descubre nuestra metodología de trabajo que te permitirá crecer sin ser un esclavo de tu negocio. Te acompañamos de principio a fin en todo el proceso.
El proceso de planificación se adapta al 100% de los negocios y es un proceso esencial para el crecimiento y el futuro éxito de la compañía.
Realizamos un presupuesto sin compromiso que siempre se adapta a las necesidades específicas de cada cliente.
Nunca aceptaríamos un encargo cuyo retorno en nuestro cliente no suponga un incremento del valor de su negocio.
¿Qué pasará si sigo como hasta ahora?




La clave radica en un plan. En tu capacidad para influir tanto en tu futuro como en el de tus empleados


Si no mides tus objetivos no estás gestionando. Si no gestionas pierdes el control.
Sin control no hay resultados predecibles