TESORERÍA
¿Sabes porqué empresas que venden o tienen una buena idea de negocio acaban cerrando?
Ven conmigo si quieres vivir. Terminator (1984)
¿Has pensado alguna vez porqué empresas que venden o tienen una buena idea de negocio acaban cerrando?
¿Realmente piensas que es porque el empresario no conocía bien su negocio o no tuvo una buena idea?
La mayoría de las empresas muere en los primeros años de vida y una de las principales causas es la falta de liquidez.
Las razones suelen ser:

En definitiva, una gestión ineficaz de la tesorería puede llevar al traste una idea buenísima de negocio.
¡NO PERMITAS QUE TE OCURRA A TI LO MISMO!
Si sientes...


Hablemos claro.
¿Es complicada una correcta gestión de tesorería?
Una vez definidos los procesos internos y los flujos de información necesarios, la gestión se lleva a cabo de una manera muy simple. Lo realmente importante es la toma de decisiones sobre cómo vamos a financiarnos y dónde vamos a invertir.
La Información es el activo más valioso en este tipo de decisiones. Contar con el tiempo necesario para poder llevarlas a cabo y sin presiones es esencial.
¿Cuánto tardaré en conseguir gestionar eficazmente mi tesorería?
En tan solo 30 días tendrás las herramientas y la formación necesaria para planificar y gestionar la tesorería de tu empresa, lo que te permitirá tener una visión a corto y medio plazo, y así tener la tranquilidad de que contarás con el tiempo necesario para tomar las mejores decisiones de inversión y financiación.





Una correcta gestión de la tesorería te permitirá:




¿QUÉ PASARÁ SI SIGO COMO HASTA AHORA?





Seguramente te preguntes...
El proceso de planificación se adapta al 100% de los negocios y es un proceso esencial para el crecimiento y el futuro éxito de la compañía.
Realizamos un presupuesto sin compromiso que siempre se adapta a las necesidades específicas de cada cliente.
Nunca aceptaríamos un encargo cuyo retorno en nuestro cliente no suponga un incremento del valor de su negocio.




La clave radica en un plan. En tu capacidad para influir tanto en tu futuro como en el de tus empleados




Si no mides tus objetivos no estás gestionando. Si no gestionas pierdes el control.
Sin control no hay resultados predecibles